Tortugas albinas, curiosos seres sin color

Esta curiosa foto corresponde a una tortuga albina. Dos de estas tortugas nacieron días atrás en la Reserva Biológica de Abufari, un área protegida de 280.000 hectáreas en el estado de Amazonas, Brasil.

Según Elmano Augusto, miembro del Instituto Chico Mendes para la Conservación de la Biodiversidad, organismo responsable de esta reserva, el hecho de que nazca una tortuga sin pigmentación es un fenómeno muy raro, ya que nacen unas pocas entre cientos de miles, aunque no se trata en modo alguno de un hecho único en la naturaleza.

Por el contrario, se tiene documentados otros casos similares, de reptiles albinos, y de otros animales sin pigmentación en la piel (como este hermoso ejemplar de león que puedes ver a continuación).

El especialista brasilero también agregó con respecto a las tortugas que, como era de esperar, estas tortugas albinas son más sensibles a los rayos del sol, y en general, son más frágiles que el resto de su congéneres verdes. También son víctima fácil de dos clases de predadores: por un lado, los predadores naturales de las tortugas, otros animales (caimanes, por ejemplo) que detectan más fácilmente a esta tortuguitas albinas al no poder camuflarse entre la maleza; y por otro lado, son presa de los cazadores clandestinos, que saben muy bien que un ejemplar de estas características puede llegar a alcanzar una precio de varios miles de dólares en el mercado negro.

Debido a estos peligros potenciales que amenazan a las singulares tortugas, las autoridades del Instituto Chico Mendes para la Conservación de la Biodiversidad han decido mantener en cautiverio a dichos ejemplares hasta que alcancen la fortaleza necesaria para sobrevivir por sí mismas en la zona protegida de la reserva ecológica.