¿Cuál es el origen de los diamantes?
El diamante, que significa en griego «propio» o «inalterable«, puede presentarse como una piedra preciosa de diversos colores. Existe una amplísima gama de transparencias y se dice que los mejores ejemplares precisamente son los que cuentan con esta particularidad. Por supuesto que también hay blancos, amarillos, castaños, verdes, azules, etc. Pero debemos saber que este tipo de propiedades se debe a la presencia de impurezas de elementos diferentes al carbón.
Si bien son realmente costosos y no tan fáciles de conseguir, los diamantes existen desde hace miles de años y se dice que el los primeros ejemplares se hallaron en la India hace 3000 años, en minas en depósitos aluviales de una determinada piedra.
Si hablamos de su origen, les comento que geólogos aún hoy en día siguen discutiendo el tema. Lo que si están de acuerdo es que se precisa calor y presión a gran escala para que el carbono cristalice con esta estructura. Según diversas teorías, el diamante en sí, se ha formado a grandes profundidades y surgió en la superficie acompañado siempre de fenómenos volcánicos, precisamente en el interior de una roca básica llamada Kimberlita.
Posteriormente, el material con contenido de diamante sube a la superficie y forma durante años y años diversos yacimientos. Su formación está ligada principalmente a la cristalización del magma residual de composición ultra básica rica en compuestos volátiles.
Desde ya que para su extracción son necesarios varios procesos. Primero hay que considerar la exfoliación, luego la aserradura, la talla y finalmente el pulimento. A grandes rasgos les informo que se saca a fuego el brillo de la piedra, al igual que las imperfecciones que puede poseer, se continúa usando un cortador de hierro, parecido al cuchillo y el toque final consiste en formar las facetas de la gema acabada. Por lo general estos increíbles brillos se cortan en 58 caras.
Como información extra, tengan en cuenta si es que van a comprar un diamante, que sus propiedades radican en ser buenos conductores de calor, malos de electricidad y transparentes a rayos X Asimismo, el verdadero ejemplar es capaz de cortar un vidrio.
¿Cómo pueden darse cuenta si es verdadero o no? Deben sumergir el diamante en una solución de yoduro de metileno, si flota estamos frente uno verdadero, si se hunde, lamentablemente no es original.
Foto: aragonesesalhabla